miércoles, 18 de noviembre de 2009

La revolución Francesa

Fue el cambio político más importante que se produjo en Europa, a fines del siglo XVIII. No fue sólo importante para Francia, sino que sirvió de ejemplo para otros países, en donde se desataron conflictos sociales similares, en contra de un régimen anacrónico y opresor, como era la monarquía.

Durante el reinado de Luis XIV (1643-1715) Francia se hallaba bajo el dominio de una monarquía absolutista, el poder de rey y de la nobleza era la base de este régimen, pero en realidad el estado se encontraba en una situación económica bastante limitada donde pocos ricos tenían muchos privilegios y muchos pobres pocos derechos.

El mantenimiento de un estado absolutista demandaba mucho dinero, ya que:
1. Existía un gran número de funcionarios en el gobierno y cada uno buscaba su propio beneficio
2. Se tenía que mantener un gran ejército permanente.
3. La corte vivía rodeada de lujos.

Algunos ministros de Hacienda trataron de encontrar una solución a esta crisis, pero sus medidas sólo complicaron más la situación.

La sociedad estaba compuesta por tres sectores sociales llamados estados, los cuales no eran para nada justos y fueron causante de mucho descontento social:

El primer estado era la Iglesia; poseía el 10% de las berras de Francia y no pagaba impuestos. Recibía de los campesinos el “diezmo”, es decirla décima parte del producto de sus cosechas.

El segundo estado era la nobleza. Dueños del 30 % de las tierras, los nobles estaban no pagaban la mayoría de los impuestos y ocupaban todos los cargos públicos. Los campesinos les pagaban tributo y sólo podían venderles sus cosechas a ellos.

El tercer estado comprendía al 98% de la población. Por un lado estaba la burguesía, formada por los ricos financistas y banqueros que hacían negocios con el estado; los artesanos, funcionarios menores y comerciantes. Por otra parte, existían campesinos libres, muy pequeños propietarios. Finalmente estaban los siervos, que debían trabajo y obediencia a sus señores. El tercer estado carecía de poder y decisión política, pero pagaba todos los impuestos, hacia los peores trabajos y no tenía ningún derecho.

Debido al descontento de la población, y la terrible situación económica por la que el país estaba pasando, la nobleza exigió reunir a los Estados Generales para imponer una ley de impuestos en 1789.

Cuando los Estados Generales se reunieron, dieron fin al sistema de conteo que el país tenía porque la nobleza y el clero siempre tomaban las decisiones que a ese sector le convenía ya que pertenecía a un estamento privilegiado y además superaban en número a la burguesía., ahora con la solución dada, el tercer estamento (la burguesía) pudo tomar el control de la situación, y comenzó a sesionar como Asamblea Nacional, y juraron solemnemente que ésta no se disolvería hasta tanto no se logre conformar una Constitución Nacional.

En 14 de Julio de 1789, la burguesía se vio apoyada por un gran sector explotado por la nobleza, los campesinos, que saturados de injusticias y de hambre, se dirigen violentamente a la Bastilla (símbolo del régimen absolutista), donde funcionaba como cárcel de los opositores al sistema de gobierno, y toman la toman por la fuerza. Esto atemorizó a los partidarios del sistema antiguo y sirvió para inclinar la balanza en favor de los revolucionarios, desplazando así del poder a los nobles y partidarios del absolutismo.

Aunque en la Asamblea Nacional la burguesía trabajó de forma muy unida, la realidad era que estaba dividida en dos: la alta burguesía y la baja burguesía. Y cuando llegó el momento de decidir la forma de gobierno, la alta burguesía llegar a un acuerdo con la monarquía y formar una monarquía constitucional, mientras que la baja exigía más derechos, poder participar en el gobierno y una mejor repartición de las riquezas.

Los diputados de la asamblea, decidieron eliminar los privilegios de la nobleza, se les obligó a pagar impuestos y se eliminó el diezmo a la Iglesia. Pocos días después la asamblea dicta la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano, esta proclama se transformó en la síntesis de las ideas revolucionarias, basadas en tres banderas: igualdad, fraternidad y libertad.

El 3 de Septiembre de 1789, se proclamó la Constitución de carácter moderado, en donde la alta burguesía había logrado prevalecer sus ideales, quedando a cargo los tres poderes, ejecutivo, legislativo y judicial.

Los jacobinos hicieron alianzas con los sans-culottes, y durante 1793, se creó una institución destinada a establecer un rígido control de los opositores, y castigarlos duramente y aplicar la pena de muerte a todos aquellos que no apoyaban el sistema de gobierno republicano. Se trataba de mantener dominados a sus opositores, a través del miedo, por lo que se lo llamó: El terror revolucionario

Conociendo la debilidad de este gobierno, la alta burguesía aprovechando la situación, y deseosos de terminar con los “excesos del populacho” en Julio de 1794, produjeron un golpe de estado, desplazando la república y creando un Directorio.

El Directorio, eliminó la libertad política de votar a los más humildes, se eliminó el control de precios y se tomaron medidas que favorecieron a los comerciantes y especuladores.

De todas maneras, el sector popular siguió pasando por las misma penurias de siempre y míseras condiciones de vida.

Entre los militares que apoyaban al Directorio, se encontraba Napoleón Bonaparte, que no tardó en hacerse del poder, mediante un golpe militar, aprovechando el gran prestigio que se había ganado en las diversas victorias militares en otros países. En 1799 se apoderó del gobierno se

Francia, y se coronó como Primer Cónsul, concentrando cada vez más poder, hasta llegar a emperador en 1804. Con el tiempo la burguesía lo apoyó, ya que conservó muchos de los principios declarados en la Constitución, especialmente aquellos que beneficiaban a la burguesía más acomodada. A su vez estos lo apoyaban, porque evitaban el regreso de la república jacobina y del antiguo régimen aristocrático.


Conclusión

1. Esta revolución significó el triunfo del pueblo pobre, oprimido y cansado de la injusticias, sobre los privilegios de la nobleza y el clero.

2. La revolución francesa le aportó a todos los pueblos el luchar por la libertad, fraternidad y la igualdad.

3. La revolución francesa fue inspiración de muchos otros pueblos oprimidos.

4. A pesar de que se haya dado ese movimiento tan importante en el mundo segimos viviendo mucha desigualdad tanto social como de repartición de riquezas.

5. Fue uno de los cambios políticos más importantes de todo el mundo.



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